Efectos de la tormenta

El granizo derribó ramas y hojas, traspasó los desagües de plástico, violentó la puerta de chapa y las ventanas, acribilló el nailon y lo que hubiera quedado olvidado en el patio; en medio, el viento, unánime en su corpulencia, lo zamarreó todo en una búsqueda frenética y el agua bloqueó las salidas, liberó las calles, puso un precinto a cualquier reacción y la hizo dar vueltas, desorientándola.

Violento atraco de la naturaleza, la tormenta rindió a la ciudad en minutos y aisló más esta casa en la que yo iba y venía desde la habitación a la puerta, desasosegado.

No me engaño, te sé fuerte, resuelta, sé que enseguida te habras organizado, que la lluvia te habra dado en la cara poniéndolo todo a salvo, pero que no te alcanzaron las piedras. Que los postes, si tienen caer, caen a un lado, sin rozar nada de lo tuyo. Que las aguas no cuentan con el trébol de cuatro hojas que protege tu puerta, tus brazos, tus piernas. Que la energía va y vuelve, los cables se desbaratan en la noche, y permanecen tus ojos, tu voz, tus lazos. Lo sé, no me engaño.

Aquí las copas de las moreras quedaron ralas, sepultados los geranios, no habrá mandarinas en unos meses: verdes miniaturas, adornan ahora la mesa. Gotea el desagüe roto sobre mi cabeza en la mañana, voy hasta una silla blanca que quedó como un gruyer y compruebo que su diseño retocado aún me soporta. Abro el diario: pérdidas totales para la cosecha. Estoy exhausto. Alguien más restituye las cosas a mi alrededor, descarta lo roto, despeja el camino, agrupa las hojas increíblemente muertas.

¿Habrá alcanzado para que los palos borrachos que plantamos salven la vida, para que los brotes que esperanzados les provocamos no fueran mutilados, para que su flor y su sombra sigan pendientes? ¿Acaso lo olvidaste? Yo no.


Fotografía: Abel Sberna - Título: "A la sombra de un palo borracho" - Fuente: Internet

1 comentario:

  1. Ey! Mi foto!! Me halaga que la hayas elegido para tu blog.
    Saludos!

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